Una nueva ley Reino Unido ley antidrones restringe el vuelo de drones a menos de 400 metros de prisiones e instituciones para menores delincuentes. La ley, que entró en vigor el 25 de enero, impone multas de hasta 2.500 libras a quienes vuelen a menos de 400 metros de las instituciones penitenciarias designadas. Con la ley anterior, la policía sólo podía actuar si había pruebas de contrabando en esas instituciones.
Aquellos operadores de drones que introduzcan o intenten introducir contrabando en instituciones penitenciarias pueden enfrentarse hasta a una década entre rejas. El propósito de la nueva ley es reducir el contrabando de artículos ilícitos en las prisiones, que impulsa la violencia y la actividad delictiva dentro del sistema penitenciario. Estadísticas recientes revelan que el número de drones capturados o avistados cerca de recintos penitenciarios se ha más que duplicado entre 2019 y 2021.
Entre 2019 y 2021, más de 500 drones fueron observados, interceptados o confiscados cerca de prisiones en Inglaterra y Gales. Desde junio de 2016, un esfuerzo conjunto de la policía y el personal penitenciario ha dado lugar a más de 70 condenas relacionadas con drones, lo que ha supuesto una pena acumulada de 240 años de prisión para las personas que infringieron la ley.
Implantación virtual "zonas de exclusión aérea" está preparada para aumentar la probabilidad de que las fuerzas del orden detengan a los delincuentes organizados durante sus actividades delictivas. Esto, a su vez, agilizará el proceso de incoación de procedimientos, obtención de condenas e imposición de penas de prisión sustanciales. Además, estas novedosas las medidas antidrones reforzarán la seguridad impidiendo la filmación aérea no autorizada de prisiones.
Ministro de Prisiones y Libertad Condicional Edward Argar hizo hincapié en la intensificación de los esfuerzos del gobierno para combatir el contrabando en las prisiones. Destacó la aplicación de nuevas anti-drones y perros detectores de drogas son medidas cruciales para adelantarse a las tácticas empleadas por la delincuencia organizada. El objetivo de estas medidas es mejorar la seguridad combatiendo los artículos ilícitos que contribuyen a la violencia en los centros penitenciarios.
En HMP Risley en Cheshire, un intento orquestado de llevar a cabo una operación ilegal con drones implicó a una banda criminal que intentaba introducir en la prisión drogas de clase A, teléfonos móviles y tarjetas SIM, con un valor estimado superior a 1,7 millones de libras. Este grupo realizó más de 20 vuelos de drones sobre el recinto penitenciario entre agosto y diciembre de 2020. Tras un exhaustivo esfuerzo de colaboración entre la Policía de Cheshire y el personal de HMP Risley, los siete individuos implicados en la operación fueron condenados colectivamente a más de 30 años de prisión.
Post Image- Vista aérea de una prisión HMP tomada desde un helicóptero en el Reino Unido. (Crédito de la imagen: Adobe Stock by Tom Falcon Harding)